De los casi 24 litros de fluido que pasan cada día desde el torrente sanguíneo a los tejidos corporales transportando oxígeno y nutrientes, unos 21 vuelven a los capilares con dióxido de carbono y residuos celulares. Los aproximadamente 3 litros restantes pasan al interior de los vasos del sistema linfático y se filtran en los ganglios linfáticos a través de las células cebadas, a las que aligeran de grasas, proteínas y otros desechos. La linfa, que también transporta glóbulos blancos que combaten infecciones (linfocitos), circula sólo como resultado de movimientos musculares, sin depender de una bomba central como el corazón.
El sistema linfático es
uno de los más importantes del cuerpo, por todas las funciones que realiza a
favor de la limpieza y la defensa del cuerpo.
Está considerado como parte
del sistema circulatorio porque está formado por conductos parecidos a los
vasos capilares, que transportan un líquido llamado linfa, que proviene de la
sangre y regresa a ella. Este sistema constituye por tanto la segunda red de
transporte de líquidos corporales.
El sistema linfático está
constituido por los troncos y conductos linfáticos de los órganos linfoideos
primarios y secundarios. Cumple cuatro funciones básicas:
- El mantenimiento del equilibrio osmolar.
- Contribuye de manera principal a formar y activar el sistema inmunitario (las defensas del organismo).
- Recolecta el quilo a partir del contenido intestinal, un producto que tiene un elevado contenido en grasas.
- Controla la concentración de proteínas en el intersticio, el
volumen del líquido intersticial y su presión.
Tejidos y órganos linfáticos
Los tejidos linfáticos del sistema linfático son el bazo, el timo, las placas de peyer, los ganglios linfáticos y la médula
ósea.
El bazo tiene la función de filtrar la sangre y limpiarla de formas celulares
alteradas y, junto con el timo y la médula ósea, cumplen la función de madurar
a los linfocitos, que son un tipo de leucocito.
Patologías del sistema
linfático
Las manifestaciones más comunes de enfermedad del sistema linfático son:
- La presencia de adenopatías (hinchazón de los ganglios)
- La aparición de una forma de edema conocido como linfedema
- Edema linfodinámico Aumento de carga linfática por trastornos
circulatorios (cardiacos, renal, pre menstrual, traumatismo, quemaduras.)
- Edema linfostático o linfedema: Es el aumento de proteína y líquido intersticial; fallo linfático.
- Lipidema: Síndrome de piernas grasosas (tobillo, piernas y cadera).
- Mixedema: Acumulación de mucopolisacáridos y proteínas especio
intersticial, alteraciones glandulares tiroides (cara, nuca, dorso de las
manos y de los pies).
- La linfangitis por una herida punzante en el sistema linfático.
- Cáncer: El cáncer del sistema linfático se llama linfoma.